Mónica Díaz en entrevista para Usach al Día en el marco del mapeo de intereses de formación en ESNNA

Universidad y ONG refuerzan formación académica para enfrentar la explotación sexual infantil

Entre 2022 y 2023, un total de 2.184 niñas, niños y adolescentes fueron identificados por el Ministerio Público, como víctimas de explotación sexual en el país, lo que significa que por cada 100.000 personas de entre 0 a 17 años, 49 sufrieron este grave tipo de violencia, lo que representa un aumento en la tasa del 29% entre estos dos años.

El pasado 2 de junio, en el tercer piso de la Escuela de Psicología, se realizó la quinta sesión de la actividad de formación sobre Explotación Sexual de Niñas, Niños y Adolescentes (Esnna), en el marco del mapeo de intereses de formación en Esnna, impulsado por el Centro de Estudios Migratorios (CEM) en colaboración con la ONG Raíces y el Capítulo Chileno de ObservaLATrata.

El mapeo busca identificar, en una primera etapa, el interés de docentes de la Facultad de Humanidades, especialmente de carreras de Pedagogía y Psicología, y de la Facultad de Ciencias Médicas, en todas sus carreras, en incorporar a sus asignaturas contenidos relacionados con la Esnna y la Trata de Personas.

Con anterioridad, en el mes de abril y mayo, se dio inicio a los procesos de capacitación en diversas asignaturas: la asignatura de Abordajes interseccionales de la niñez y adolescencia de la carrera de Pedagogía en Inglés, dictada por la profesora Claudia Fonseca, de la Escuela de Educación, posteriormente en la asignatura de práctica de especialización clínica en Psicología, asignatura a cargo de la profesora Marcela García-Huidobro y en la asignatura de Psicología del ciclo vital I, a cargo de la profesora Claudia Calquín. 

Las clases contaron con una introducción de la profesora Mónica Díaz, académica del Centro de Estudios Migratorios (CEM), quien explicó los objetivos del mapeo y destacó la relevancia de esta colaboración entre el CEM, la ONG Raíces y el Capítulo Chileno de ObservaLATrata. En su intervención, enfatizó la necesidad de visibilizar esta grave vulneración de derechos humanos, que afecta a diversas niñeces, -entre las que se encuentran las infancias migrantes-, y de fortalecer la formación profesional para su prevención y abordaje.

“La iniciativa surge de una preocupación compartida ante la escasa visibilización y baja detección oportuna de estas graves vulneraciones, que continúan siendo normalizadas en distintos contextos sociales. Se considera fundamental fortalecer la formación inicial de profesionales que, desde sus futuros ámbitos de acción, puedan contribuir a la prevención, detección temprana y atención integral de estas situaciones, con especial foco en la protección de la niñez migrante”, expresó la investigadora Mónica Díaz Leiva del CEM.

En estas primeras capacitaciones, ha participado Ingrid Almendras, encargada de Sensibilización y Redes de ONG Raíces, Loreto Caro, directora de ONG Raíces y Erica Svriz, co-coordinadora del Observatorio Latinoamericano de Trata Capítulo Chileno y coordinadora de RATT Chile. En la actividad se presentan videos de una campaña que se llama “El silencio te hace cómplice” en donde las y los estudiantes pueden conectarse con relatos de niñas y niños que han vivido esa situación, a través del trabajo que ha realizado durante años la ONG Raíces. Del mismo modo, RATT Chile presenta un video sobre trata de personas que ilustra a través de historias de vida la complejidad del fenómeno.

El objetivo es ver qué ocurre con nuestro estudiantado al verse enfrentado a este tema, para luego conceptualizar sobre qué es Esnna y Trata, mostrando claramente que es un delito, una violación grave a los derechos humanos, que tiene determinadas manifestaciones y características, haciéndose las distinciones necesarias en relación a otros delitos sexuales, pero que no incorporan el intercambio, que es la característica de la Esnna, dado que a las víctimas se les explota como un objeto sexual o mercancía. 

“Son vistos como un objeto en el que existe un facilitador, un explotador y un cliente y todo un contexto cultural que normaliza el delito. Al explicarles esta violación de derechos a nuestro estudiantado, logran comprender que la explotación infantil no debe ser llamada ‘prostitución infantil’, pues no existe un consentimiento válido de la víctima, sino una incitación o coacción de un explotador”, aseguró Díaz.

La académica indica que esta iniciativa también aborda el marco legal y las diferentes manifestaciones asociadas a este ilícito que afecta a niñas, niños y adolescentes. En este sentido, se aborda el cómo se da la explotación sexual, a través del pago de dinero, de afecto, de protección, alimentación o un lugar donde dormir, lo que va generando una complementariedad entre carencias afectivas de las NNA y las estrategias de los explotadores.

También se avizoran las redes de turismo, donde adultos nacionales o extranjeros solicitan niñas y niños con fines sexuales. Asimismo, la utilización de niños, niñas y adolescentes en la producción de imágenes de connotación y/o abuso sexual. Finalmente, y una de las más importantes, la captación a través de plataformas de internet, como juegos en línea, donde adultos inescrupulosos se hacen pasar por niños, tema que toma gran interés entre las y los estudiantes al ser nativos digitales que comprenden de mayor forma la dificultad.

Adicional, el curso enseña indicadores para descubrir que una niña, niño o adolescente pueda estar sufriendo este fenómeno, en el que se enunciaron situaciones como manejo de dinero o especies de valor,  vinculación con personas adultas sin origen claro, deserción escolar/ausencias, deambulación por diferentes domicilios o estar en situación de calle, algunas niñas, niños o adolescentes pueden llegar con personas adultas que no son sus familiares al Cesfam o con parejas con mucha diferencia de edad, entre otras. 

“Como CEM acabamos de presentar un proyecto Fonis, que esperamos adjudicarnos y que propone el estudio de rutas de protección para niñas y niños migrantes en condiciones de alto riesgo psicosocial, en dispositivos de atención primaria en tres regiones: Santiago, Valparaíso y Machalí. Esos recorridos de protección tienen que ver con estos temas, y lo que pretendemos es identificar y comprender lo que pasa con la niñez migrante, pero, además, trabajar temas específicos que son urgentes a nivel preventivo y que en muchas ocasiones no son abordados de la mano con las universidades, debido a la encapsulación de las casas de estudios en sus propios temas, desconectándose de la realidad. En el fondo, es como las universidades generan investigación para transformar esas realidades, así contribuir con datos y conocimiento para incidir en la política pública”, concluyó.

Fuente: Usach Al Día